VENGANZA

El Barcelona pasó por encima del Athletic en un partido que quedó marcado a los tres minutos por el penalti y expulsión que Gorka Iraizoz cometió sobre Luis Suárez. El charrúa, autor de tres tantos, fue el hombre de la noche y se coloca, con 18 tantos, como Pichichi de la Liga. También marcaron Messi, de penalti, Neymar y Rakitic.

La historia del encuentro se terminó tan pronto como lo que tardó Iraizoz en derribar a Luis Suárez dentro del área. La jugada venía de un error de Etxeita, que pecó de exceso de confianza al proteger un balón en la frontal, pensando que Suárez no le apretaría tanto. El urugayo fue a por todas y tuvo premio. Se quedó solo ante Gorka y este no tuvo más remedio que derribarlo al intentar alcanzar el balón. Penalti y expulsión, un castigo excesivo, aunque Mateu se limitó a hacer cumplir la norma. Messi se encargó de marcarlo.

Muniain fue el sacrificado por Valverde para darle entrada a Herrerín bajo palos. A partir de ahí, el encuentro fue un monólogo del Barça, que avasalló sin compasión a los vascos. Quizás los de Luis Enrique tenían en mente aquel 4-0 de una noche de verano, el de la ida de la Supercopa de España que impidió al Barça alcanzar el sextete.

El partido se convirtió en una especie de exhibición de los culés. Antes del descanso, Neymar hizo el segundo. El chaparrón llegó en la renudación. Messi se quedó en los vestuarios por unas molestias en los isquios y Neymar asumió el papel protagonista de la noche. El brasileño asistió a Suárez en el 3-0 y a Rakitic en el cuarto.

Messi se retiró con molestias, Jordi Alba, lesionado, y Piqué vio la quinta amarilla

Ni el Barcelona ni el uruguayo bajaron la intensidad en ningún momento, lo que les valió para apuntalar el resultado con una goleada escandalosa.

Aparte de las molestias de Messi, el partido tiene otras consecuencias para los catalanes. Por un lado, la lesión de Jordi Alba, que se rompió al intentar llegar a un balón largo con el partido decidido. Por otro, el ver que Aleix Vidal ya está en condiciones de pelearle la titularidad a Dani Alves. El ex del Sevilla actuó de inicio junto al teórico once de gala culé y rindió a un buen nivel. Además, Gerard Piqué vio la quinta tarjeta amarilla, por lo que no estará el próximo fin de semana en el partido contra el Málaga.

Por parte del Athletic, llevó con la máxima dignidad un partido que se acabó antes de empezar. Los vascos mantuvieron el tipo e incluso protagonizaron algún que otro acercamiento a la portería de Bravo. Imposible pedirles más dadas las circunstancias.